*
Llegando a límite (síncope), después de querer ser a todas sincero conmigo mismo, no puedo más que quedar callado, bajo peldaños de hojas impresas. Un botellín de agua me ayuda a resistir su próxima caída. Mirando de nuevo aquellos rostros extraños, cercanos gracias a la imaginación vouyer de los programadores. Debo dejar de pensarme inepto. Debo corresponder a mi condición. Grises serán aquellos días, pero cerca del desierto. Días añorables donde mi vista se perderá lejos, lejos de toda pantalla infame.Anya Triestram
No hay comentarios:
Publicar un comentario